Enseñanza Iniciatica (I)



Iniciación o "sacramento"... ?

Muchas veces he tratado de explicar en que consiste el aprendizaje. Muchos otros individuos de diferentes especialidades científicas como psicólogos, pedagogos, psicopedagogos, siquiatras y largas y anchas listas de “especialistas”, que van desde teólogos  a físicos o de maestros de escuelas primarias experimentados y visionarios hasta artistas, poetas, músicos e incluso políticos brillantes.
Y otras extrañas especialidades con raros y complejos nombres que tratan de determinar los medios de que disponemos para “comunicar” nuestros conocimientos, saber, experiencia, historias de vida, especulaciones teóricas e intelectuales a reflexiones trascendentes sobre el sentido  de la vida y la conciencia individual.
Pero las naciones pasan, las culturas y las civilizaciones pasan y nada queda. Solo el misterio surge una y otra vez, frente a nosotros, los actuales hombres machos y hembras, para ser resuelto sin más antecedentes que nuestra propia y corta historia: el último minuto en la vida de este planeta, de las veintitrés horas y 59’ precedentes, que desconocemos y solo podemos imaginar (porque tal vez NO sabemos buscarlas donde están guardadas).   Algunos, en su día pintaron paredes de cuevas, levantaron extraños monumentos o escribieron mensajes en extrañas lenguas que hoy, nadie entiende.
Incluso hoy, hay algunos que escriben en estos medios, parecidos a “mentes artificiales” primitivas, siempre, todos, tratando de avisarnos ALGO…
Civilizaciones enteras han surgido para entregar un mensaje y ¿se han desintegrado en el Olvido al cumplir con ese destino? ¿Miles de millones de vidas  de seres conscientes “valen” lo mismo que el corredor de Maratón? ¿Es esta historia en si misma una “enseñanza” de aquellos hombres? ¿Tendrá sentido el argumento de aquel libro (“El Gen Egoísta”), escrito antes  de la salida del “Voyager” (y que 'retorna' en 'Star Trek' como el 'desconcertado' "V'yer en 'busca de su 'creador'...) , allá por la década de los 60’, en donde se planteaba esa posibilidad? Nuestros genes  viajan por el espacio buscando otros mundos. ¿Ya podemos caer en el Olvido, como especie, y marcharnos cansados de una fiesta aburrida?

Comentarios

  1. En el caso específico de los hombres machos y hembras de nuestra sociedad actual es de esperar que no llegue a darse esa situación. Incluso contando con la Noosfera y la herencia de conocimiento adquirida por nuestras vidas pasadas, el empeño por no ver nos está volviendo a todos ciegos. O a casi todos. Y ya sabes que no hay peor ciego que el que no quiere ver… así que tranquilo, esta civilización está destinada a perdurar. Temo más que esos monos del pacifico llegue un momento que nos superen intelectualmente y nos sometan, al menos si no caen en el error de dejarse aleccionar y alienar como lo hicimos nosotros.

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